La prensa belga asegura que Carles Puigdemont pone rumbo a Waterloo

Carles Puigdemont abandona Bruselas y pone rumbo a Waterloo, según el diario neerlandés De Tijd. La localidad, situada a unos 20 kilómetros de la capital belga, se encuentra en el corazón del Brabante Valón. Waterloo, conocida por ser el enclave en el que comenzó el declive de Napoleón y su imperio, está en la provincia más pequeña del país y pertenece a Valonia, la parte francesa de Bélgica. Hasta ahora, el expresidente de la Generalitat, que fue recibido con los brazos abiertos por nacionalistas flamencos, se alojaba de forma intermitente en una villa propiedad de un empresario cercano a Bart de Wever, el polémico alcalde de Amberes del partido nacionalista flamenco (N-VA). Ahora, tras el aplazamiento del pleno de investidura y la publicación de unos mensajes en los que reconocía que el «procés» había terminado, Puigdemont parece haber elegido emplazamiento para instalarse de forma permanente. El alquiler habría sido gestionado a través del empresario Josep Maria Matamala Alsina, amigo de Puigdemont, que habría efectuado los trámites para que dispusiese de las llaves de la casa con efecto inmediato. El contrato, que según apuntan los medios belgas se firmó ayer, requeriría el pago de dos meses de fianza, informa Ep. La nueva residencia de Puigdemont, según informa De Tijd, tiene una superficie de 550 metros cuadrados, seis habitaciones, tres baños y una sauna. Su precio al mes es de 4.400 euros. Se encuentra en la calle del abogado, según informa el diario L’Echo.
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