Abascal: «El mayor enemigo de España es el PSOE»

Los candidatos de Vox al Congreso de los Diputados han tenido su puesta de largo en La Cubierta de Leganés durante el mitin más grande de toda la precampaña. Los últimos sondeos reflejan una ralentización en su estimación de voto a pesar del auge que ha demostrado la formación desde octubre: el discurso endurecido del líder del Partido Popular, Pablo Casado, les está sangrando votos. Por ello Vox ha atizado más que nunca con sus reproches a los populares y ha atacado con severidad al PSOE y a Ciudadanos. En el acto han participado el presidente de Vox, Santiago Abascal; la presidenta de la formación en Madrid, Rocío Monasterio, y el fundador del partido, José Antonio Ortega Lara. La organización ha cifrado un total de 8.500 asistentes —han faltado 500 para llenar el aforo al completo— y 5.000 visualizaciones mediante Youtube. Como acostumbra la formación, el encuentro ha sido todo un éxito aunque, sin embargo, no ha superado las 10.000 personas que reunieron en Vistalegre en octubre. Abascal ha defendido la supresión de las autonomías, una de las piedras angulares de la formación, denunciado que «son el cáncer de España» y que no quieren «dejar que España muera». Aunque las palabras más duras se las ha dedicado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. «Quiero decir con claridad que el mayor problema de España tiene nombre y tiene siglas. Se llama PSOE, y tiene un pacto con los golpistas separatistas, con los que han apoyado el terrorismo y con los comunistas que nos quieren llevar a Venezuela», ha espetado el líder de Vox, entre aplausos de los presentes, en referencia a Podemos y a los grupos nacionalistas vascos y catalanes. El líder de Vox ha apelado a los votantes socialistas y les ha dicho que «si sus dirigentes no demuestran amor a la patria», su partido estará ahí para acogerlos sin «reproches». «Aquí hay un partido que quiere defender a España, no les hacemos ningún tipo de reproche, porque el reproche es a sus dirigentes que les han traicionado». Asimismo, Abascal ha cuestionado lo poco de «obrero» que tiene el PSOE. Órdago al PP y a Cs Al igual que ocurrió en Vistalegre en octubre, Abascal ha lanzado un órdago al Partido Popular y a Ciudadanos. Sobre el PP ha vuelto a repetir el líder de Vox que son «la derechita cobarde que no se atreve a nada». Así lo ha expresado después de que la semana pasada el expresidente del Gobierno José María Aznar dijera que no se atrevería a decírselo a los ojos. Cada reproche a los partidos en liza ha levantado a los presentes de sus asientos al grito de: «¡Presidente, presidente» y «¡Viva España». Especialmente los destinados a los populares. Respecto a Cs, Abascal ha insistido una vez más en que son «la veleta naranja» que actúa a «órdenes de los intereses extranjeros». Se refiere a las similitudes programáticas que el presidente de Cs, Albert Rivera, tiene con el presidente de Francia, Emmanuel Macron. Además, Abascal ha aseverado que en Ciudadanos sí que son «populismo» porque «es un partido de diseño que intenta contentar viendo qué dicen las encuestas». En clave postelectoral, sin embargo, ha expresado que se tendrán que entender con ellos, aunque solo si «fuera de las fronteras les dejan». No obstante, ha sido Monasterio quien ha atacado con más dureza al Partido Popular utilizando los casos de corrupción como arma y recordando el día que Mariano Rajoy tuvo que abandonar la Moncloa tras la moción de censura del PSOE apoyada por los separatistas catalanes. «No podemos ir de la mano de un partido debilitado por la corrupción», ha expresado Monasterio desde el escenario. «De un partido enfangado por la debilidad que abandonó a España y su líder se fue a ahogar las penas a un bar entregando España a los enemigos», espetó. Bajada de impuestos Durante su intervención, Abascal se ha comprometido a que si gobiernan, realizarán «la mayor bajada de impuestos de la historia» de España: «Anunciamos aquí que basta ya de las oligarquías políticas, haremos la mayor bajada de impuestos de la historia, especialmente a las clases medias y desfavorecidas, queremos devolver a la sociedad española el timón de su futuro». Los cabeza de lista de la formación defendieron la supresión de la autonomía de Cataluña, la creación de un Estado unitario y la ilegalización de los grupos soberanistas catalanes que persiguen la ruptura de España. Y también se comprometieron a la derogación «inmediata» de la ley de Memoria Histórica, al fin de las autonomías y a la derogación de la Ley contra la Violencia de Género.
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